Esto no quiere ser una crónica, más bien un comentario algo extenso de un
muy buen fin de semana.
El sábado dió para poco más que registrarse, rodar un mínimo para probar la
bici y pasear por la Expo. Cena con los Dragons y grupos de apoyo en La
Tagliatella (con Martí y Rubén hemos comprobado que sus platos infernales para
compartir son un mito), y a dormir temprano que este domingo empezaría antes de
lo normal.
Despertador a las 4 a .m.,
desayuno personalizado y rápido para boxes a poner todo a punto para la prueba.
En un pim-pam casi sin darme cuenta estaba en la zona de salida con Rubén y
Miguel (salíamos los tres en el mismo grupo), primer contacto con el agua,
cuatro brazadas y al cajón. Decidí salir por la izquierda, a buscar la primera
boya un poco abierto para evitar golpes en la medida de lo posible. Gracias a
la buena señalización llego al primer giro casi sin darme cuenta para encarar
la recta más larga del recorrido. En ese momento perdí referencia con las boyas
porque estaban muy lejos, así que decido seguir pies hasta poder visualizarla.
Durante todo el recorrido me sentí muy bien intentando mantener la frecuencia
de brazos y una buena posición de la cabeza (claro, eso dentro de mi cabeza, ya
que mi estilo se parece más al de una estrella de mar que al de un delfín).
Salgo del agua y miro el crono por primera vez, 35’ invertidos para los 2100 m que marca el Garmin.
Muy bien, muy contento con mi natación. Ahora a rodar.
Salgo en la bici mucho más rápido de lo que quería pero (casi) sin esfuerzo
me mantengo todo el rato por encima de los 31 Km/h de promedio. Este
tramo, lo sabíamos, es aburrido. Una recta interminable, casi sin desnivel, en
la que parecía que rodaba yo solo pero que cada tanto pasaban grupos de cinco o
diez participantes (¡viva el drafting!). A pesar de haber salido primero del
agua, Miguel y Rubén me pasaron antes de llegar a la T2. Y a pesar de parecer
improbable, Martí, habiendo salido diez minutos después a nadar, ahí estaba
dejando atrás en el final de la bici, pedazo de recuperación (yo creo que fue
por las ruedas). Cuando llego a boxes mi Garmin marca 83 Km , punto menos para la
organización que prometía 86 en una prueba en la que deberían ser 90.
Y ahora a correr, me había propuesto salir e intentar no mirar el paso, y
al pricipio lo conseguí. Enseguida alcanzo a Martí, Rubén y Miguel y sigo a
paso muy vivo. Cuando miro el reloj en el kilómetro tres veo que estaba
corriendo mucho más rápido de lo planificado pero no quiero bajarlo porque me
encuentro bien. Estoy seguro que en unos kilómetros las piernas me lo iban a
hacer bajar por fuerza. El recorrido es un sube y baja, y la subida infernal de
más de 200 metros
un rompe-ritmos. Los grupos de apoyo estaban colocados estratégicamente en el
inicio de la subida (Crespi family y Cia.) y al inicio de las vueltas (Judith, Toni
y Cia) con lo que el subidón de ánimo estaba asegurado. Pese a todo, consigo
mantener bien los parciales, cuando encaro la vuelta a meta, solo 1,5 Km , veo que es posible
bajar de 1:40 la media maratón y no me lo creo, pero fue solo medio minuto de
debilidad y los cuádriceps que amenazaban con subirse hasta la cadera lo que me
hicieron terminarla en 1:41, mi mejor marca en media en un Half.
Tiempo final 4:58 hs. También mi mejor marca en Half pero teniendo en cuenta
que faltaban 7 Km
de bici…Igualmente muy contento, en el buen camino para Calella. Próxima parada
Gran Fondo La Mussara (con terroríficas rampas del 20%) y B de Banyoles.
Una cosa más, gracias a todos los Dragons que estuvieron el fin de semana,
tanto física como virtualmente, apoyando a todos los que corríamos. Y
especialmente a mis dos fans número uno (si, comparten puesto) que siguieron al
dorsal 300 desde casa.
3 comentaris:
Enhorabuena!! Gran Half, gran representación!! Bravos!!
Enhorabuena Leo!!! Destacar tu gran progresión en el Swim y sobre todo el run estratosférico que te marcaste dada la dureza del circuito.
¡Gracias chicos!. Ahora hay que seguir sumando para no perder las ganancias.
Publica un comentari a l'entrada